lunes, 31 de marzo de 2014

Súper héroe

Al llegar a casa de dar mi paseo de guardia me he metido de cabeza en la ducha, esperando que brotara de la alcachofa el agua calentita que me restituyera, pero en vez de eso ha brotado un agua fría que me ha invertido cierto órgano. Y, sin más remedio, he tenido que poner en marcha la operación butano, cosa que es harto coñazo, pero impepinable.

Y, por un momento, he pensado que seria estupendo ser un súper héroe, con mi capita de serie, por supuesto. Y así no tendría que bajar la bombona, sacar el coche, subir la bombona vacía cuesta arriba y bajar la llena cuesta abajo, meter el coche y subir la bombona hasta el calentador, para que se produzca el milagro del agua caliente. Tan solo tendría que ponerme la capa, coger la bombona con cuidado de no pillar la capa con ella, porque la torta seria bastante humillante y salir por el balcón para el asombro y envidia de los viandantes, si es que en ese momento hubiera y miraran hacia arriba. Aunque digo yo que ver a un tío disfrazado volando con una bombona es algo que no pasaría desapercibido.

Claro que, pensando mas la cuestión, incluso no necesitaría comprar la bombona. Imagino que en el ramillete de súper poderes estaría el de calentar el agua, con lo que me ahorraría las operaciones butano. Incluso, apurando más, podría ahorrarme también la electricidad de la vitro, pues aplicando de nuevo mis súper poderes me haría unas recetas de rechupete. Lo de fregar después ya no tengo claro como lo haría. Incluso el internet, dando WiFi a apéndices infrautilizados.

Incluso podría prescindir de coche, cosa que tal y como está la gasolina no es para despreciarlo. Con un saltito y mi capa podría ir donde quisiera. Lo malo es el equipaje. Me tendría que apañar con una mochila no muy grande pero, claro, me tendría que caber una capa, para llevar de quita y pon y no ser un súper guarro. También unas mudas y un cepillo de dientes, que seguro que las súper caries son muy dolorosas. Y a recorrer España de gorra. Bueno, de capa.

En conclusión, que la cosa es para no despreciarla. Tengo que preguntar si hay oposiciones para eso. Porque lo que son mis genes, solamente me han dejado enfermedades. ¡Dichoso Darwin!

domingo, 30 de marzo de 2014

Un año ya

¡Que grato pasar el tiempo con tan buena compañía!

Domingo

Las higueras ya están retoñando. La campana anuncia la misa de una. A pesar de todo, hace frio.

Y, cada vez que vuelvo a este banco, me siento más viejo y cansado.

Tradición

lunes, 24 de marzo de 2014

Empezando bien la semana

Y para seguir con la necro-racha, me se rompe el router.

domingo, 23 de marzo de 2014

Trabajos de jardinería

Después de la limpieza, más bien arrase, del huerto que hicimos el agosto hemos decidido redecorar la cosa. Y es que en el invierno no se veía tan desolador como ahora en primavera. Más que nada por aquello de que las plantas suelen brotar en esa estación. Siempre que haya de donde brotar, claro.

Así que, ni cortos ni perezosos, nos presentamos en el vivero el sábado y, llevados por la codicia, empezamos a llenar los carros, igualito que en el súper. Buscábamos plantas de sol, así que nos trajimos dalias, felicias, tagetes, anissyum y los vulgarmente conocidos como conejillos, de los que desconocemos nombre más fino.


Lo primero de todo fue preparar el terreno. Como ya nos dijo el jardinero, echarlos al suelo iba a quedar regular, por lo que se nos ocurrió montar un arriate como el que se ve arriba. Hubo que excavar un poco, remover la tierra y reutilizar el cascajo de las obras que nuestros vecinos tan amablemente nos dejaron. Es una forma estupenda de reutilizar materiales, aparte de que nos evitamos viajes hacia el contenedor tirando de tan pesada carga.

En el primero, que empezó a tomar forma el sábado, me colé de tamaño y no había manera de verlo lleno de tierra. Le pusimos por nombre "lágrima", pese a que la forma que tenía en mi cabeza era completamente distinta. La de los cactus se parece a un Pou y, en este caso, nos hemos quedado cortos, pero de plantas. Y eso que hemos empezado a buscar cactus para llenarlo. Nos quedará otra visita al vivero. 


Ahora nos quedaría poner otro debajo de la higuera. Pero, en esta ocasión, lo voy a hacer antes de llenarlo. Y creo que voy a poner bulbos. Si les sobra alguno, pues me lo mandan, que ya me ponen alfombra roja en el vivero cuando me ven bajarme del coche.

sábado, 22 de marzo de 2014

Axioma

La paciencia es el arma de los cobardes

miércoles, 19 de marzo de 2014

Hace un año, hoy era martes

Hace un año la noche era oscura. Tan oscura que ni siquiera las luces me iluminaban la carretera. Ni los reflejos de las líneas llegaban a verse.

Hace un año, caía el agua del cielo. No como una bendición, sino como una advertencia. A la que no hice caso.

Hace un año pensé, con mi buena intención. Pero me equivoqué.

Y ahora ya no puedo hacer nada.

domingo, 16 de marzo de 2014

Domingo

Siempre que vengo a este banco me saluda la misma música, la del viento meciendo las hojas de los árboles.

La primavera ya ha empezado a romper por estos lugares. Calor de manga corta. Mariposas que revolotean. Pájaros que vuelven a cantar. El verde, la esperanza, de nuevo abriéndose paso.

El valle me trae sonidos del despertar sin prisa, del domingo tranquilo, de buscar tiempo para aquello que quedó pendiente en la semana. Un gallo que canta, unos niños que juegan.

La tranquilidad está a tan solo un paso. La tranquilidad perdida por buscar, por no encontrar, por no conformarse. La tranquilidad, en definitiva, la encuentro en mi banco.

Las tradiciones hay que mantenerlas

viernes, 14 de marzo de 2014

Historia de la Frivolidad

Aquí.

Viernes

Jugar al escondite en el supermercado solo tiene dos salidas honrosas: que no te encuentren o que todos los participantes admitan, educada e hipócritamente, que se ha perdido.

martes, 11 de marzo de 2014

domingo, 9 de marzo de 2014

Post para hacer constar

Que, tras 40 años, hemos cambiado el hierbaluiso de sitio.

jueves, 6 de marzo de 2014

La TDT

Estoy viendo un documento del máximo interés. Se trata de Belén Esteban pasando unos días en Granada. Hasta el momento, la veo compartiendo la mañana de compras en el Albaycín con su anfitriona, mientras pasean en olor de multitudes. Luego la veo comiendo y preparando la actuación de la noche.

Tan petrificado estoy que no puedo ni cambiar de canal. Algo, quizá el ángel exterminador de Buñuel, me lo impide.

domingo, 2 de marzo de 2014